para aquellos pocos que lo leen...
Necesito un transplante urgente y bastante generoso de ganas de ir a trabajar mañana.
Quedé tan exhausta, extenuada y re podrida, que me pasó lo siguiente.
Estaba tan pero tan limada que no sólo casi me quedo dormida en el subte (en la última estación, ridícula!) sino que voy a cargar la tarjeta del subte-barra-tren, no? Y hago la cola, y pido que me carguen $20 y pago con 50. Me devuelven la tarjeta, agarro el ticket y ME VOY.
Entendés? ME FUI, sin agarrar el vuelto.
Voy hasta el andén, entro en el tren, me ubico en un costado, lo más cómodamente para viajar parada. Paro. Los engranajes en mi cabeza empiezan a girar, chirriando, pidiendo a gritos WD40 o como se llame.
Meto las manos en los bolsillos del saco. Nada.
En los bolsillos del pantalón. Siento papel moneda. Toco. Muy poco para ser $30. Eran los dos pesos que agarré a la mañana. Salgo del tren, vuelvo a la ventanilla.
Cola.
Espero.
Perdón, yo cargué $20 y pagué con $5o. Usted me dio el vuelto?
No.
...
Le grité dos veces pero usted se las picó.
...
(cuenta el dinero)
Perdón, no tuve un buen día. Muchísimas gracias.